Cada vez es mas común ver en la "Pirámide de alimentación saludable" bebidas como la cerveza y el vino. Ahora bien, ¿sabemos realmente que propiedades tiene la cerveza y cuando su dosis deja de ser buena para pasar a realizar el efecto contrario?
Propiedades de la cerveza
- Folatos, lo que se asocia a una disminución del riesgo de tener anemia megaloblástica (debida a falta de vitamina B12) y malformaciones en la médula espinal.
- Polifenoles, que actúan como potentes antioxidantes y nos protegen de enfermedades cardiovasculares, además de reducir el envejecimiento del organismo.
- Fibra soluble. El hecho de que presente fibra soluble hace que tenga un papel interesante ya que evita el estreñimiento, disminuye el colesterol y la incidencia de cáncer de colon y de diverticulosis (pequeñas bolsas en el colon o intestino grueso).
- Sodio. La cerveza es hiposódica por lo que se recomienda para personas con hipertensión. Además, la presencia de sodio hace que sea diurética.
- Alcohol etílico. En los bebedores moderados de cerveza se disminuye la incidencia de cardiopatía isquémica (infartos y angina de pecho), hipertensión arterial, diabetes mellitus y accidente cerebrovascular. Esto es debido a que el alcohol moderado aumenta el HDL (conocido como "colesterol bueno") el cual tiene la capacidad de producir tales efectos.
- Bajo contenido calórico. Una caña de 200 ml tiene alrededor de unas 90 kcal (45kcal/100ml), siendo menor en la ceveza sin alcohol,17 kcal/100ml.
- Promueve la secreción de jugos gástricos, facilita la digestión y estimula el apetito.
- Disminuye la excitabilidad y facilita la relajación.
- Es un maravilloso hidratante. Contiene una elevada cantidad de agua, sales minerales y vitaminas.
Ahora bien, ¿cuándo la cerveza deja de ser tan beneficiosa?
Según la OMS, un consumo responsable de cerveza estaría en 1-2 latas máximo al día para una mujer y 2 en los hombres. Si te pasas de la dosis recomendada, los daños aumentan exponencialmente causando graves efectos a largo plazo en bebedores crónicos, algunos de los cuales podrían ser:
- Cirrosis hepática
- Cáncer esofágico, de mama, hepático, orofaringe y bucal.
- Enfermedad cerebrovascular, hipertensión y cardiopatía isquémica.
- Trastornos mentales.
Es decir, la cerveza, como todo, es buena en su justa medida y no hay que olvidar que dosis altas de alcohol nos perjudica, y mucho, la salud.
MANTÉN UN CONSUMO RESPONSABLE
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